Ayer miraba con mi hermano cualquier película, tan buena que no recuerdo nada más que el hecho de que tenía una canción medio swing. La letra era totalmente intrascendente, y comenzaba, como el big band suele, con una entrada super light, en la que se presagiaba el tema de la canción, con sólo un piano detrás. Era obvio que pronto entraría una sección de metales. Obvio. Se lo dije a mi hermano, y de la nada, nos dimos cuenta que al cantar con una Big Band uno puede decir cualquier cosa. No importa la letra, en absoluto. Hicimos la prueba. Quiero hacer caca, cantamos al unísono. Pastel de chocolate. Lo mismo. Todo encaja en las armonías de la Big Band. Es como si al cantar jazz tuviéramos que pilotear un avión, toda la responsabilidad recae en quien canta. Los demás se encargan del engranaje, pero el volante es totalmente del cantante. La Big Band, por otro lado, es como prender el piloto automático. La banda lo hace todo, va tejiendo todo de tal manera que el cantante sólo tendrá que sostener una nota, una cuarta, una blue note al final de la canción, por un lapso de ocho a diez segundos, y esperar los aplausos. Eso es todo, y siempre funciona.
Tal vez es por eso detesto a Frank Sinatra, quien se paraba el cuello -extra elegante, obviamente- con una Big Band. Quien sabe qué porquerías cantaría si hubiera tenido que cantar con sólo un trio -de jazz o de boleros, el resultado sería el mismo. Recordemos que hace un tiempo Robie Williams contrató una Big Band y grabó lo que le vino en gana. El resultado: Elogios y desmayos por un popero que pudo hacer "jazz" de Big Band. Yo creo que fue un engaño, vil y sucio engaño. Y quien crea lo contrario, lo reto a contratarme una Big Band y dejarme cantar un par de canciones. La primera sería totalmente una invención trivial, tipo "cantando en el baño", y la otra, por mero gusto, "Old devil moon". Garantizo que la calidad musical será la misma en ambos casos. Quien sabe, tal vez si me pongo un traje o un smoking -tuxedo-, hasta me vuelva famoso.
Tal vez es por eso detesto a Frank Sinatra, quien se paraba el cuello -extra elegante, obviamente- con una Big Band. Quien sabe qué porquerías cantaría si hubiera tenido que cantar con sólo un trio -de jazz o de boleros, el resultado sería el mismo. Recordemos que hace un tiempo Robie Williams contrató una Big Band y grabó lo que le vino en gana. El resultado: Elogios y desmayos por un popero que pudo hacer "jazz" de Big Band. Yo creo que fue un engaño, vil y sucio engaño. Y quien crea lo contrario, lo reto a contratarme una Big Band y dejarme cantar un par de canciones. La primera sería totalmente una invención trivial, tipo "cantando en el baño", y la otra, por mero gusto, "Old devil moon". Garantizo que la calidad musical será la misma en ambos casos. Quien sabe, tal vez si me pongo un traje o un smoking -tuxedo-, hasta me vuelva famoso.
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