I Think it's gonna rain o post contra la vergüenza

Home Alone. Resulta que, conforme al plan, sigo en Xalapa, en casa de mis papás. Pero con una pequeña particularidad. Todos se fueron. Así que estoy solo, con poco dinero y sobras de comida, con solamente cuidar de las perras -alimentarlas, pasearlas, darles agua y limpiar sus cacas- y trabajar por deberes. Pocas responsabilidades, poco dinero, poca comida. Tal y como vivo en Puebla.

Sin embargo, me encuentro con que el calor costeño nos acecha, por lo que trabajar se vuelve difícil. Entre el sudor inevitable y todo tipo de insectos chupasangre, a penas me acostumbro. Dan ganas de bañarse tres veces al día, pero bueno, no me quejo, sólo me aclimato.

El asunto es que planeé mi estancia esta semana de tal manera que no tenga que salir de casa más que a caminar con las perras y a traer víveres, cosa que hice hoy en la tarde. Fui a Superama -no me juzgue el lector, pero es la única tienda cercana, yo prefiero la gran bodega- caminando, y todo indicaba que llovería. Así que apreté el paso, y mientras caminaba, levanté las manos esporádicamente para que me cayeran algunas gotitas de lluvia en las manos. De la nada, en medio de la calle y sin darme cuenta que estaba frente a un carro con chicas guapas -en xalapa existe una gran cantidad de chicas guapas, uno no sabe para donde voltear- comencé a cantar. Broken windows and empty hallways, a pale dead moon in a sky streak'd in gray; human kindness is overflowin', and I think it's gonna rain today. Grité como loco, y entre más me daba cuenta de que la gente volteaba, más me alegraba. Me alegró gritar, me alegró que se nublara, y aún me alegró recordar esa canción.

Siempre pensé que Nina Simone era básica, tal vez demasiado básica. Cuando uno se inicia en asuntos del jazz, uno comienza por Nina Simone. Es dulce y rasposa, básica, sencilla, pero drásticamente cautivadora. Y bueno, como en prácticamente todas las facetas de mi vida, tan pronto aprendo un poquito más, comienza a darme pena hablar de las primeras experiencias, de los primeros amores, y entonces evito hablar de eso. Me pasó con Cortázar, con Maples Arce y con Nina Simone. 

Así que este es un post contra la vergüenza. Sí, fui un adolescente raro que se sentía cronopio, que le cantaba a los postes de luz y que le decía dentrífico a la pasta de dientes porque sonaba más literario. Pero de los males el menos; hoy escucho Nina Simone, tal como lo hacía hace un tiempo. Habla en inglés, and she says she thinks it's gonna rain today. Y yo le creo.

p.d. Siguiendo mi tendencia reciente a buscar versiones de una misma rola, busco I think it's gonna rain today en youtube. Huelga decir que ninguna versión se compara con la de Nina Simone. Norah Jones le subió como dos tonos, y Randy Newman se queda dormido mientras canta. Nadie como doña Simone.