Ya que mis papás nunca me permitieron creer en los reyes magos sino que me enseñaron a buscar las ofertas, intentaré hacer la cartita a los lectores, con la esperanza de que alguno(s) pesque(n) la idea y me den alguna respuesta.
Queridos lectores -en el hipotético caso de que existan-
He tenido suficiente. Estoy consciente de que nadie me obliga a mantener este post, pero la verdad es que ya no quiero seguir así. Cada vez que escribo y subo un post -y últimamente es muuuy frecuente- me encuentro con que mi mapita y su respectiva tabla de visita ha registrado muchos mirones. Me alegra de verdad, y sin embargo, algo me desconcierta. Casi nunca hay comentarios. Yo sigo algunos blogs y me he dado cuenta que todos tienen una media de comentarios de al menos 2. Pero hay algunos que se sirven con cuchara grande, que se despachan de a veinte o treinta comentarios por post. ¿Será mucho pedir, queridos y hasta ahora hipotéticos -salvo la abierta seguidora, ja- lectores, que me pongan comentarios? Uno también tiene su corazoncito, y hay que cuidarlo. Pero no me quedaré aquí. Hay que tomar medidas drásticas. Así que, lectores, el ultimátum va así: Si no escriben una suma aproximada de diez comentarios -de diferentes autores- en este post, secuestraré el blog y lo haré privado, al fin que para eso soy guerrillero inexperto. Las experiencias de los hermanos de Colombia no son en vano. La guerrilla vive, y no escatimaremos en tortura para este blog. Así que, muy preciados lectores, espero la respuesta.
Samuel
He tenido suficiente. Estoy consciente de que nadie me obliga a mantener este post, pero la verdad es que ya no quiero seguir así. Cada vez que escribo y subo un post -y últimamente es muuuy frecuente- me encuentro con que mi mapita y su respectiva tabla de visita ha registrado muchos mirones. Me alegra de verdad, y sin embargo, algo me desconcierta. Casi nunca hay comentarios. Yo sigo algunos blogs y me he dado cuenta que todos tienen una media de comentarios de al menos 2. Pero hay algunos que se sirven con cuchara grande, que se despachan de a veinte o treinta comentarios por post. ¿Será mucho pedir, queridos y hasta ahora hipotéticos -salvo la abierta seguidora, ja- lectores, que me pongan comentarios? Uno también tiene su corazoncito, y hay que cuidarlo. Pero no me quedaré aquí. Hay que tomar medidas drásticas. Así que, lectores, el ultimátum va así: Si no escriben una suma aproximada de diez comentarios -de diferentes autores- en este post, secuestraré el blog y lo haré privado, al fin que para eso soy guerrillero inexperto. Las experiencias de los hermanos de Colombia no son en vano. La guerrilla vive, y no escatimaremos en tortura para este blog. Así que, muy preciados lectores, espero la respuesta.
Samuel
4 comentarios:
Ja. Ja.
Desde Cholula.
Ánimo, así es esto de los blogs.
Creo que es la segunda vez que entro al tuyo; sin embargo, creo que a la mayoría de los usuarios prefieren hacer un comentario insulso en el Hi5, MySpace o cualquiera de sus variantes, e ignorar a los blogs; quizá por la misma razón que es más factible ver en cartelera una película producida en Hollywood que otra producida en Europa (guardando las justas proporciones en la comparación).
Pero bueno, me animo a escribirte no sólo por el "ultimátum" que haces, sino porque creo que tienes textos de calidad y valdría la pena seguir visitándote.
Saludos
desde la provincia fresera.
Gracias a los que, de todo corazón, fomentan la cultura del secuestro. Jo. No logramos la meta, pero si sirve de consuelo, tampoco el teletón. Saludos a los amables
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