sábado, 15 de noviembre de 2008

del Boxer y la trusa, o breve disertación en contra de una niñez opresiva

Finalmente, trataré de abordar uno de los temas que más tiempo han ocupado en mi mente a lo largo de esta semana. El tópico surgió, como muchos otros últimamente, de la conversación con G. Para ser específicos, nos encontrábamos trabajando su solicitud para alguna cosa en cierto café-librería de la ciudad, cuando en el feisbuc de ella apareció el siguiente aviso:
"Escritor X" -guardaremos el nombre por motivos de seguridad- es ahora tu amigo
Seguido de un mensaje personalizado de bienvenida. Nos sorprendió mucho, pero yo, que ya lo había agregado tiempo antes, le dije a G que no se sorprendiera, al fin que el "Escritor X" es una persona famosa -más de dosmil amigos de feisbuc lo avalan.
Sin embargo, el asunto trascendió porque en ese mensaje había un tono medio de coquetería, y la despedida era demasiado confianzuda. Un "besos" remataba el mensaje. Obviamente G le contestó, y le envió "saludos cordiales" para castigar tal atrevimiento. Nos quedamos pensando cómo era posible que alguien fuera tan lanzado, y entonces recordé haber visto una foto del "Escritor X" al lado de una alberca, con sólo una trusita de nadar. --Es un latinlover con mechón de canas-- dije, y a continuación nos dedicamos a ver sus fotos. Efectivamente, el "Escritor X" tiene mayoritariamente fotos con mujeres, cuyas caras van desde el simple deleite hasta un cuasi estratosférico orgullo primo del orgasmo.
G se sorprendió de que yo hablara de la trusa, y me lo dijo. Yo contesté que podía decirle quién usaba trusa y quién boxer con sólo mirar la forma de caminar, la cara, la forma de vestir. Hicimos la prueba con dos parroquianos del café, y con algunos conocidos en común. Todo parecía quedar allí, pero recordé algunos momentos que, ahora que he hecho algunas investigaciones al respecto, podemos intentar sistematizar:

  1. Cuando éramos niños, mi hermano y yo -y según he podido comprobar, muchos de mis amigos y contemporáneos ochenteros- usamos trusa. Fuimos obligados a usarla.
  2. Nosotros, los de la trusa, nos poníamos tristes en los intercambios de boxer de la escuela, porque realmente nunca habíamos usado boxers, y era feo tener sólo uno, pues lo utilizabamos demasiado y terminábamos por romperlo.
  3. Nuestra(s) mamá(s) intentaban engañarnos comprándonos trusas de colores. Rojas, verdes, azul rey o azulmarino, las trusas eran siempre trusas.
  4. Las mamás nos obligaban a usar trusa porque así los testículos no se te cuelgan.
  5. El primer boxer que tuvimos se rompió porque lo usamos para jugar futbol.
  6. El primer boxer que utilizamos coincide misteriosamente con las épocas de mayor interés y nece[si]dad por atraer la atención del sexo opuesto.
  7. La primera vez que usamos boxer pasamos prácticamente todo el día con una erección. En palabras de Gen-Am, uno no sabe qué hacer con tanta libertad.
  8. Las épocas de mayor rebeldia son aquellas en las que le dijimos a mamá que ya no queríamos que nos comprara trusas. Ahora éramos hombres y queríamos usar boxer. Ella argumentó que eran más caros, pero que podíamos tratar de comprar poco a poco algunos para sustituir a las trusas.
  9. El tipo de boxers que usamos es, realmente, un asunto de clase. La clase popular usa boxers de tianguis, con un estampado que se transparenta y que generalmente representa a nuestro equipo de futbol -yo tengo de los pumas. La clase media-baja, compra boxers del supermercado, pero espera a que se pongan en oferta. Fruit of the loom llega a poner al 2x1 los paquetes de 5 boxers, de cuadritos o rayitas. Por su parte, la clase media-alta y hacia arriba, compra sus boxers en las tiendas fresas. Es por ellos que existen las zonas de ropa interior en el palacio de hierro. Los demás, aquellos que nunca podremos comprar calzones de 150 pesos, hemos pasado por ahí, diciéndole a nuestro(a)s acompañante(s) algo como --chale, calzones de marca, eso es el colmo-- Pero la verdad es que son muy bonitos y todos quisiéramos unos.
  10. Es extraño, pero la gran mayoría de los jóvenes-adultos usan boxers. Habría que hacer una investigación más exaustiva para definir el momento justo en el que el joven adulto deja los boxers y regresa a la trusa estándar. Tal vez, este momento, esté relacionado con la crisis de los treinta o con el momento de percatarse de que se esté quedando calvo, y represente el acabose existencial de los hombres.
Las investigaciones seguirán, sólo es cuestión de definir la orientación. Gen-Am, siempre tan observador, me dijo que la comprobación de la hipótesis 10 puede realizarse los domingos, en las canchas llaneras de futbol. Una apabullante mayoría de los jugadores utiliza trusa, y coincidentemente ronda por los treinta. Quizás la influencia de los jugadores de más experiencia hace que los jóvenes, invitados a jugar por su excelente condición física y porque literalmente "no se cansan", comiencen a sentirse avergonzados de su rebeldía de ropa interior, y cambien a la trusa para encajar mejor en la sociedad. Habrá que realizar las investigaciones correspondientes.

10 comentarios:

G Velázquez dijo...

cabe agregar que yo me sorprendí porque justo días antes había tenido una conversación con un amigo, también traumado con las trusas...

excelente post!

LSz. dijo...

No hay mucho que agregar, es un excelente post, como afirma G. Quizá, y sólo por biografía: siempre fui rebelde, nunca me gustaron las trusas y muy pronto me amotinaba hasta el punto de no usar ropa interior, con otras consecuencias, claro.

Saludo y nos seguimos leyendo-comentando.

Unknown dijo...

jo

debo decir que yo hice lo mismo
en la prepa

el problema es que resulta muuuy mala combinación el no bañarse y no usar interiores
nunca más
por el bien común

después de haber revelado demasiado
saludo

oranch

PEDRO dijo...

hola amigo pues yo opino lo mismo que entre los chavos mayores de 25 años ya no se ve mucho el uso del boxer y por lo que respecta a mi no los uso porque nunca me gustaron pero con tal de encajar en la sociedad es decir con los de mi edad en la secundaria y prepa los use aunque no me agradaban lo que hacemos los humanos para que no nos discriminen los amigos.
En la actualidad tengo 28 años.

suerte

Unknown dijo...

gracias por comentar José Cristobal Pedro

suerte de regreso

juan camargo dijo...

excelente post jaja tienes toda la razon

Anónimo dijo...

Un poco tarde pero bueno. Coincido contigo en casi todo.
En mi caso, de niño usaba trusas y ya en la secundaria decidí cambiar a los boxers. Cursando la carrera empecé a usar boxers de los ajustados. Ya a los 25 volví a las trusas, aunque ahora alternando con boxers ajustados.

Edgar dijo...

Pues a mi me encanta usar trusas de diferentes colores y marcas desde las caras a las baratitas de tianguis sí las compras a tú medida son muy cómodas y muy sexis. Aunque no descarto en menor medida el uso de boxer ajustado. Los que se te hacen bolas y todos flojos definitivamente no.

Anónimo dijo...

Yo siempre he usado trusas ami no me laten los boxer se me hacen incomodos

Anónimo dijo...

Igual a mi de niño me acostumbraron ala trusa, por que como dices es mas barato, y como muchos trate de cambiarlos a boxer una vez empece a trabajar y a ganar mi dinero, pero como mencionaste "uno no sabe que hacer con tanta libertad" y comencé a usar "bikini" y luego le di una segunda oportunidad con los boxer ajustados; ya en la actualidad uso boxer normales, boxer ajustados, trusas y bikinis dependiendo del clima (aqui es tropico) o de la ropa que me ponga (bermudas o pantalones)